31 de octubre de 2010

Circos

No sé si será la indeseada influencia del espurio halloween o del cambio de hora, no lo sé, pero esta mañana en la ducha me sentí raro. De pronto era Rael, o sea, el prota de The lamb lies down on Broadway de Genesis, por lo que salí corriendo al espejo aterrado para ver si me había metamorfoseado a lo Kafka por la noche pero no, era tan sólo el bicho de siempre, o sea, sin más bultos que mis michelines y con mi careto cincuentón habitual, ambos endémicos.

Tuve que abrir el blog para caer en la cuenta de cual era mi monstruosidad. Me pregunté -me lo pregunto siempre- qué hace ‘un chico como yo en un sitio como éste’ y sentí ser la mujer barbuda, el hombre elefante, uno más mostrando al mundo su, digamos, ‘peculiaridad’.

Claro, ahora que ya no existen los freak shows a algún sitio teníamos que ir los freakies a ejecutar nuestras catarsis dejando al mundo horrorizarse o divertirse –depende del espectador- con la visión de nuestros atormentados cuerpos. O mentes.


Ahora que lo pienso, ¿no será esta entrada una especie de trick-or-treating? Espero que no, que ya sería demasiada decadencia.


30 de octubre de 2010

Maltrato

Me tienes más que harto, siempre lo mismo, no sé quién te has creído. Es que no se puede estar todo el santo día con lo mismo, pasándome revista, reprochándomelo todo, de verdad que aburres hasta a las cabras con esa monserga cansina. Hasta aquí hemos llegado. Sí, ya sé que hasta hoy has ganado las batallas gracias a jugar con la ventaja de la información privilegiada y la impunidad que yo mismo te he brindado, pero ya me da igual, me has matado demasiadas veces y ésta no pienso ya resucitar dándote otra vez la oportunidad de abatirme de nuevo. No. A partir de hoy sólo seré un cadáver, tu cadáver, tu muerto viviente.

¿Sabes?, tiene sus ventajas esto de no desear, de no necesitar, de no anhelar, de no sentir…ojalá lo hubiera descubierto mucho antes y hace años que habría terminado este acoso. Conciencia, cuando ahora te hablo frente a frente, muerto para siempre, has perdido tu poder, has perdido la última batalla.

27 de octubre de 2010

Apolo

Apolo ha entrado en el vestuario a cámara lenta dejando tras de sí una estela de gotas de agua que caen de su cuerpo, con vocación de lágrimas, y que no han podido mantenerse adheridas a él tras su breve viaje desde la piscina. Ahora se le ve de espaldas y no puede humanamente asemejarse más a la perfección a no ser que, como hace ahora, se da la vuelta y sus ojos miran al frente distraídamente mientras se pasea la escueta toallita de microfibra por su piel blanca, tan sólo oculta por el pegajoso speedo que, no obstante, explica a la perfección aquello que no vemos. La visión de tanta belleza me turba y me excita hasta el extremo de verme casi sorprendido por esos ojos distraídos.

Estoy reviendo videos de los Dieux du Stade, sí, pero nada comparado con Apolo, con quien he tenido la gracia de cruzarme unos minutos a cámara lenta esta mañana.

21 de octubre de 2010

Space Oddity

El primer agraciado -¿dije agraciado?- del club de Peticiones del Bloguero ha sido ese chico balear que responde al nick de Xim, seguidor impenitente de este engendroblog desde su inicio y miembro del grupo de blogueros mediterráneos que tanto me molan.
Querido Xim, versionar a Mr. Bowie no es nada fácil incluso para profesionales, que he oído alguna versión por ahí carente de la garra que tiene él, y eso precisamente le falta a mi versión. Pero bueno, esto es sólo un juego, jugar a escritores, a periodistas, a músicos, a fotógrafos,… Yo me doy por satisfecho si os lo pasáis la mitad de bien que yo. Espero que te guste, darling.

PD: Me largo unos días del suroeste y de la blogosfera. El domingo vuelvo y ya veré cómo os ha sentado esta empachera espacial.

19 de octubre de 2010

¿Qué es poesía?

La sala estaba en plena ebullición, de movimientos, de voces, de entradas, de salidas, de sentadas, de levantadas. Son pocos minutos pero intensos, de querer concentrar la noche de trabajo en unos instantes, de querer expandir unos breves mensajes a diez horas de actividad. Yo estaba de espaldas a la puerta pero te sentí llegar, porque siempre te haces sentir no sé cómo pero es así, y después tu voz me confirmó tu presencia mientras me intentaba hacer oír en la algarabía de compañeros que nos dábamos el relevo.
Mi estado era deprimente después del turno de noche, apoyados los codos sobre la mesa y mantenidos abiertos los párpados en una lucha encarnizada contra la gravedad. En ese contexto espeso y lento me saludaste posando tu mano cálida en mi hombro vencido y eso me puso en alerta, no sé de qué o contra qué, pero en alerta, y a continuación apretaste suavemente tus dedos, y yo lo entendí como una invitación a mirarte, a mirarnos. Y eso hicimos, mirarnos, brevemente, intensamente, como lo de aquel poeta del suroeste cuando decía ‘mientras clavas en mi pupila tu pupila azul’, y aunque las tuyas son como la miel también me atrevería a decir que poesía eres tú.

15 de octubre de 2010

El príncipe azul

El príncipe azul no llegó nunca, y mira que lo estuvo esperando. Y buscando. De niño, entre sus compañeros del colegio y sus amiguitos del barrio; de adolescente, entre sus colegas de instituto y de la pandilla; de joven, entre los alumnos de facultad y los compañeros de piso. Y nada, sólo sueños.

De hombre respetable y de provecho lo buscó entre los compañeros de trabajo y de la universidad –sí, otra vez la universidad-, en los chats y en las webcams. Y nada, sólo pesadillas.

Hoy ya no lo busca, ya perdió la inocencia de la niñez, la rebeldía de la adolescencia, la esperanza de la juventud, y cuando se dio cuenta se vio instalado en la bonhomía y en lo políticamente correcto, atenazado por eso tan terrible de “lo que se espera de uno”.

Hasta hace poco echó en falta fluidos, roces, contactos, pero hoy ya no, aunque no se atrevería a aventurar nada para mañana. Hoy lo que echa en falta son miradas, sonrisas, complicidades. Las que podría darle su príncipe azul pero, claro, es que le cuesta tanto aceptar que éstos no existen...


10 de octubre de 2010

Blogoclub de discos dedicados

Hola, hola, hola, hola... queridos bloguespectadores de la noche. Hoy, en nuestra sección de discos dedicados, atendemos el deseo de nuestro amigo Teodoro que nos escribe desde Málaga y que nos pide escuchar cualquier tema del mundialmente famoso cantante y multi-instrumentista Runagay. Pues ahí tienes, querido amigo Teodoro, para ti que sabemos que te lo mereces, al mejor Runagay versionando a tus paisanos Los Iberos en un tema inolvidable. Un besote fuerte, fuerte.

9 de octubre de 2010

Humo en el agua

A la hora de elegir estos fósiles he tirado del recuerdo de cuando aprendía a tocar la guitarra con los amigotes, allá por los…bueno cuando vosotros no habíais hecho la Primera Comunión todavía. Los primeros acordes que aprendíamos todos eran, por su facilidad y efectismo, los de Satisfaction de los Rolling, los de In-A-Gadda-Da-Vida de Iron Butterfly y los de Smoke on the Water de Deep Purple. Cualquier iniciado al rock de la época tenía que saber tocarlos o sería tachado de floclórico toca-sevillanas en caso contrario, y yo no iba a caer en eso, claro, que en roquero no me ganaba nadie. Cualquier día os pongo una foto de mi humilde persona con aquella guitarra de saldo donde perdí las yemas de los dedos por culpa de Ritchie Blackmore y compañía, que son los fósiles que os (pro)pongo para el finde. Sólo por ver lo bueno que está el Ian Gillan –que por las pintas que trae parece haberse escapado de los ensayos del Jesus Christ Superstar que protagonizara en la versión inglesa- merece la pena aguantar hasta el final. Por cierto, que la letra es lo más ridículo que había oído, sin menospreciar algunas de los Beatles que también tienen miga.


8 de octubre de 2010

Ciclos

Los ciclos se repiten, que si no, no lo serían, claro. El del curro es como una cuesta arriba que termina con dos días trabajando de noche, qué bonito no dormir en la cama de uno seis días de cada mes, o mejor dicho, no dormir –simplemente- seis noches de cada mes. Y remata en cuatro días de no-curro que no suelen coincidir que el del común de los mortales, que antes era esto un incordio pero ahora me está suponiendo una terapia de lo más efectiva.
Venía antier conduciendo de vuelta de la última noche nosocomial en ese estado de sobria embriaguez celebrando el día soleado que este otoño -otro ciclo- me estaba regalando en este momento de paz interior, siempre tensa paz, que forma parte de mi estado anímico, también cíclico. Merecía una pequeña celebración todo esto pero no daba con la forma de hacerlo, hasta que abrí la puerta al llegar y él me recibió, sin sujeción a ciclo ninguno, como siempre, feliz de verme llegar. En ese momento decidí cómo celebrar la conjunción planetaria que supo coordinar todos estos ciclos en este día cuya noche no había dormido en mi cama, o mejor dicho, que no había dormido.

2 de octubre de 2010

Tyler Clementi

Venía risueño del salón después de haberme tragado a Massiel en la telebasura ‘mearle las cachas’ a la panda de impresentables, incluida la recién coronada People´s Princess, que presuntamente entrevistaban a la cantante. Me he sentado en la ventana virtual y me he puesto a Cat Stevens flojito para ojear los periódicos y, enlazando y enlazando, le he visto y me ha helado la sonrisa que aún perduraba , pobre chico, en el país de la 'libertad', de la 'democracia', y nada de la América profunda, no, sino pegandito a Nueva York del que sólo lo separa el puente de George Washington. El mismo puente donde se quitó la vida hace tan sólo una semana.

En estos momentos me acuerdo de tantos comentarios frívolos que tiene uno que escuchar y leer sobre salidas del armario, que si estamos en otros tiempos, que si valentía,…menuda mierda. Que se lo digan a Tyler. O a sus padres.