Algunos, los que pretendimos ser normales, nos pasó más o menos así...
"Ella le sonríe cuando le lleva la cuenta. Solo a él. Lo notó durante un tiempo.
Ve que es buena en su trabajo. Eso le gusta.
Esta vez podría ser. Quizás es que aún no había conocido a
la mujer indicada. Quizá sea ella.
Cuando paga, se arma de valor:
"Señorita Rosie, ¿puedo invitarle a un café?"
2 comentarios:
Mamás. La mía me dejó muy pronto. Se que no habría entendido mi vida, que me la habría complicado pero ¡cómo la he hechado de menos!
La mía murió de vieja. Creo que siempre supo que era gay y ahora creo que lo prefería. Nunca aceptó que me casara y tuviera hijos. Tuvimos muchos desencuentros, pero su final nos encontró reconciliados. Esa paz me queda.
Mamás.
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