12 de noviembre de 2013

Espejo

El hombre del espejo hace tiempo que no me habla, que no me mira. Se limita a mostrarme arrugas, pelos, barba,...Y no echo de menos sus reproches matutinos ni sus juicios sumarios de antes de acostarme. No, el hombre del espejo ya no es el mismo, las pastillas al fin han acabado con él. Y por fin no me importa no saber quién soy.